
El zar del contrabando, Diego Marín, conocido como ‘Papá Pitufo’, continúa su batalla legal en Portugal, donde permanece detenido tras su captura en diciembre del año pasado. La reciente decisión de un tribunal portugués autoriza su extradición a Colombia, donde es reclamado por cargos de concierto para delinquir, favorecimiento al contrabando y cohecho.El nombre de Marín ha vuelto a la palestra pública tras revelarse que donó 500 millones de pesos colombianos a la campaña presidencial de Gustavo Petro en 2022. Este hecho ha sido cuestionado por la prensa, que además informó sobre una supuesta reunión en enero de 2022 entre Petro, Marín y el exembajador Armando Benedetti en Madrid, España.
Ante estas versiones, Petro ha respondido tajantemente, asegurando que tal encuentro nunca ocurrió. «Solo hubo un evento público con colombianos en el auditorio de la central obrera española UGT, donde dicté una conferencia», aclaró el mandatario a través de sus redes sociales.Petro, quien se encuentra de visita en Dubái, insistió en que solo conoció a Marín una vez, cuando este fue presentado como un empresario del ‘sanandresito’, término utilizado en Colombia para referirse a los comercios que venden productos importados de forma irregular.
Según el presidente, Marín no tuvo ningún rol importante en su campaña ni en sus actividades políticas.El caso de Marín ha generado una fuerte polémica en Colombia, especialmente por los presuntos vínculos de figuras políticas con actividades ilícitas. Sin embargo, la extradición de ‘Papá Pitufo’ abre un nuevo capítulo en la lucha contra el contrabando y el crimen organizado en el país. El proceso de extradición aún está en marcha, y se espera que Marín sea trasladado en las próximas semanas para enfrentar los cargos que se le imputan en Colombia.