El próximo 28 de agosto, un grupo de docentes provisionales de diferentes regiones del país llevará a cabo una manifestación frente al Ministerio de Educación Nacional. Su propósito es exigir celeridad en la asignación de plazas laborales a través del retén social, una medida diseñada para proteger a maestros en situaciones especiales que no han logrado aprobar el concurso docente.
El retén social está destinado a apoyar principalmente a madres solteras, profesores con hijos en condición de discapacidad y otros casos vulnerables, quienes, de no ser por esta disposición, podrían perder su empleo.
Ruth Estepa, una de las líderes docentes acogidas al retén social, advirtió sobre la crítica situación que atraviesan más de 150 educadores en Casanare, y destacó que, a nivel nacional, 540 docentes están en espera de una plaza laboral.
Según Estepa, estos profesionales no solo enfrentan el desempleo, sino que también padecen la falta de respuestas tanto del Ministerio de Educación como de la Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación (Fecode).
Estepa expresó su preocupación por la falta de atención a sus peticiones por parte de las autoridades educativas y el sindicato, y recordó que el plazo para implementar el retén social vence el 31 de diciembre de este año, lo que añade una mayor urgencia a la situación.
