Lo que al parecer se
trataba de una lección, resultó convirtiéndose en un terrorífico homicidio
en Trinidad.
Pedro Elías Tuay, junto a
unos terceros sobre los cuales pronto habrá más noticias, cansados de las ‘pilatunas del joven’ le
estaban dando una lección con una cuerda amarrada al cuello, con tan mala
suerte que el chico resultó muerto en la ‘terapia’, por lo que a los supuestos
homicidas optaron por colgarlo en el coliseo haciéndolo pasar como un nuevo
episodio de suicidio.
Esta versión nunca tuvo
peso ante los comunales, lo que hizo que las autoridades llegaran a los
supuestos responsables.
