Cuando se esperaba
que la Corte Constitucional hiciera un pronunciamiento contundente sobre la penalización
al maltrato animal en corridas de toros, peleas de gallos y coleo entre otros,
el debate se prolongó.
El alto tribunal
decidió dejar esa competencia en el Congreso de la República y determinó que en
un plazo de dos años, la Corporación Nacional debe definir si estas son
expresiones culturales o si son eventos que generan maltrato animal.
Esta discusión
inició hace un par de semanas, cuando después de 5 años las puertas de la Plaza
La Santamaría en Bogotá abrieron sus puertas para una nueva temporada de la
fiesta brava.
Ahora quien deberá
coger el toro por los cachos será el Congreso de la República, pero si en los
dos años no se pronuncia al respecto, se entenderá que estas actividades quedarán
penalizadas.
Ante
una reunión de gobernadores que se desarrolló en los últimos días, el mandatario
de Casanare Alirio Barrera, hizo una férrea defensa del coleo, al considerar
que no genera maltrato animal y que de acabarse esta actividad no solo se
afectaría la cultura llanera sino la economía de cientos de familias. (El
