
En un hecho sin precedentes, el expresidente Álvaro Uribe Vélez fue hallado culpable por la justicia en un juicio que mantuvo en vilo al país. La jueza determinó una pena que podría traducirse en varios años de prisión domiciliaria, aunque la defensa ya anunció que apelará la decisión.
Este lunes, tras una audiencia maratónica de más de diez horas, la jueza 44 Penal del Circuito de Bogotá, Sandra Heredia, emitió un fallo condenatorio contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez por los delitos de soborno en actuación penal y fraude procesal, en el que calificó las pruebas como “suficientemente sólidas” para declarar su responsabilidad penal.
Aunque la lectura completa de la sentencia fue aplazada para el viernes 1 de agosto, la jueza anticipó que la condena podría estar entre cuatro y ocho años de prisión, pero en modalidad domiciliaria, considerando la edad del exmandatario y su comportamiento procesal. Sin embargo, la Fiscalía pidió una pena aún más severa: nueve años de prisión y una multa de 1.025 salarios mínimos legales vigentes (equivalentes a más de 1.450 millones de pesos).
Uribe apelará el fallo
El equipo de abogados del exmandatario, encabezado por Jaime Granados, anunció que apelará el fallo ante el Tribunal Superior de Bogotá. Además, advirtió que están preparados para llevar el caso hasta la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia, lo que podría alargar la resolución definitiva por años.
“La defensa discrepa jurídicamente de las valoraciones expresadas por la jueza. Esta no es una decisión definitiva: la presunción de inocencia del expresidente Uribe permanece intacta”, señalaron en un comunicado oficial.
El caso que comenzó con una denuncia terminó en condena
Paradójicamente, el proceso judicial que llevó a Uribe a esta condena comenzó con una denuncia suya en 2012 contra el senador Iván Cepeda, a quien acusó de manipular testigos. Sin embargo, la Corte Suprema de Justicia no sólo exoneró a Cepeda, sino que abrió investigación contra el propio Uribe por presuntamente orquestar un esquema de manipulación de testigos en su beneficio.
El papel del abogado Diego Cadena fue determinante. Según la jueza, Cadena actuó bajo instrucciones de Uribe, visitando cárceles y ofreciendo beneficios a testigos para cambiar declaraciones. “Era un abogado en ascenso con grandes aspiraciones, pero con carencias intelectuales, que vio en Uribe una oportunidad de escalar social y profesionalmente”, señaló la magistrada.
Reacciones divididas
El fallo generó una fuerte polarización. Mientras sectores celebraron el actuar de la justicia, figuras del uribismo calificaron la decisión como un acto político.
El presidente Gustavo Petro escribió en su cuenta de X: “Simpatizantes o no del expresidente Uribe deben respetar esa justicia. Lo demás es bestialidad. Y Colombia debe ser sabia”.
El Centro Democrático expresó “dolor y tristeza” por el fallo, aunque afirmó que lo acata como partido que respeta el Estado de Derecho. A su vez, el expresidente Iván Duque aseguró: “Uribe no está solo. Somos millones quienes hemos visto probada su inocencia en este proceso lleno de irregularidades”.



