
Homenaje al profesor Flaminio Álvarez.
En esta oportunidad la Corporación Municipal, decidió rendir un sentido homenaje, al profesor Flaminio Álvarez quien falleció en los últimos días, tras afrontar complicaciones en su salud.
En esta ocasión los concejales ocuparon el tiempo de la sesión, para recordar con cariño y afecto, a un hombre que dejó enseñanzas sobre constancia, displina y amor por lo que se hace a varias generaciones.
Durante la sesión con acciones significativas, se observó la importancia del maestro, de aquel maestro que con palabras filosóficas y ejemplos a lo largo de su vida, educó las las mentes y las almas no sólo de los estudiantes también de los casanareños.
«Viva de tal manera, que su conciencia jamás lo atormente», con esta frase que solía decir el profesor Flaminio Álvarez, inició la intervención su esposa, la profesora Jasmín, quien luego pidió como favor especial a los alumnos que acompañaron la sesión en el recinto del Concejo, que recitaran la oración del colegio Alianza Pedagógica.
«Soy feliz, nací para amar y servir, hago el bien sin mirar a quien», aunque esta es tan solo una pequeña frase de la oración de la institución educativa, el profesor Flaminio sabía perfectamente cuando la escribió, que sus estudiantes y quién la hablase pausadamente, entendería su verdadero significado en la vida, ser feliz, amar, servir y prácticar el bien sin hacer reparos.
Flaminio de Jesús Álvarez Cruz, más que un profesor, fue un gran ser humano quien en su paso por la vida, dejó tantas enseñanzas, que aún después dejar su existencia terrenal, seguirá sirviendo a la humanidad.
«El día de su homenaje se entregaron 2.500 árboles», así lo expresó su fiel esposa la profesora Jazmín Rodríguez, al explicar que en esos árboles sembrados en diferentes partes de Casanare, iban partes de las cenizas del cuerpo de quien en vida fuera su amado y admirado esposo.
Este homenaje fue realizado en la Corporación Municipal, por iniciativa de los concejales



