
El municipio de Aguazul amaneció conmocionado el pasado sábado 18 de octubre tras el hallazgo de tres personas asesinadas en la vereda Río Chiquito, sobre la vía que comunica con Tauramena. Las víctimas dos hombres y una mujer presentaban impactos de arma de fuego, signos de tortura y estaban amarradas, según el reporte preliminar de las autoridades.
Versiones extraoficiales indican que los tres habrían sido citados en el lugar bajo la promesa de un trabajo en una finca ubicada entre Río Chiquito y La Turúa, pero en el sitio fueron asesinados.
El coronel Pablo Galindo, comandante del Departamento de Policía Casanare, informó que unidades especializadas del SIJIN, SIPOL y GAULA adelantaron los actos urgentes y la recolección de evidencias para esclarecer el crimen.
«Dos de las personas fueron halladas amarradas, con heridas de arma de fuego y signos de violencia. La mujer también presentaba impactos de bala”, detalló el oficial, quien señaló que se esperan los resultados de las necropsias para confirmar plenamente las identidades y avanzar en la investigación.
Las autoridades no descartan que las víctimas hayan sido asesinadas en otro lugar y luego abandonadas en esa zona rural de Aguazul.
Mientras tanto, el hecho ha generado temor y consternación entre los habitantes del sector, que piden reforzar la presencia de la fuerza pública.



