Migrantes venezolanos sin historial criminal, enviados por EE.UU. a megacárcel en El Salvador

El gobierno de Estados Unidos trasladó a 238 ciudadanos venezolanos al Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot) en El Salvador, una prisión de máxima seguridad utilizada para reclusos considerados de alto riesgo. Sin embargo, 101 de ellos no tienen antecedentes penales y fueron detenidos únicamente por su estatus migratorio. El presidente salvadoreño, Nayib Bukele, confirmó la llegada del grupo el domingo a través de una publicación en la red social X. “Hoy llegaron a nuestro país los primeros 238 miembros de la organización criminal venezolana, el Tren de Aragua. Fueron trasladados de inmediato al Cecot por un período de un año (renovable)”, escribió Bukele.

Sin embargo, organizaciones de derechos humanos y expertos en derecho internacional han cuestionado la legalidad del traslado. La detención masiva fue realizada bajo la Ley de Enemigos Extranjeros, una norma de 1798 que permite encarcelar sin juicio a ciudadanos de países considerados hostiles. En este caso, la ley se ha aplicado sin que los detenidos hayan sido formalmente acusados de ningún delito.

¿Qué leyes y tratados podría estar violando esta medida?

El encarcelamiento de migrantes sin antecedentes penales en una prisión de alta seguridad podría contravenir varias normativas internacionales, entre ellas:

– Convención sobre el Estatuto de los Refugiados (1951): Prohíbe la expulsión o devolución de personas a países donde puedan ser perseguidas o sufrir tratos inhumanos.

– Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos: Protege el derecho al debido proceso y prohíbe la detención arbitraria.

– Convención Americana sobre Derechos Humanos: Establece el derecho a un juicio justo y a la no discriminación.

– Derecho de Habeas Corpus en EE.UU.: La Ley de Enemigos Extranjeros, aplicada sin revisión judicial, podría entrar en conflicto con este principio constitucional.

EE.UU. pagó a El Salvador por el encarcelamiento de los migrantes

El gobierno de Biden habría transferido $6 millones a El Salvador como compensación por la detención de los migrantes venezolanos en el Cecot, aunque no se han revelado los términos exactos del acuerdo entre ambos países. Bukele también insinuó que la mano de obra forzada de los reclusos podría contribuir a financiar el funcionamiento del sistema penitenciario salvadoreño. “Con el tiempo, estas acciones, sumadas a la producción que ya generan los más de 40,000 reclusos que participan en diversos talleres y programas de trabajo bajo el programa Ocio Cero, contribuirán a la autosostenibilidad de nuestro sistema penitenciario”, afirmó el presidente.

Incógnitas sobre el futuro de la medida

El uso de la Ley de Enemigos Extranjeros para justificar el traslado de migrantes podría enfrentar un desafío legal en EE.UU., donde un sector del Congreso y organizaciones defensoras de los derechos humanos han advertido sobre la inconstitucionalidad de su aplicación en este caso. Además, el impacto de esta política en las relaciones diplomáticas entre EE.UU., Venezuela y El Salvador aún está por verse, especialmente si se confirman las denuncias sobre violaciones a los derechos de los detenidos.