En su último informe, el Ideam detalló las condiciones climáticas para el inicio de 2025, con especial atención a las regiones de la Orinoquía, que incluye al departamento de Casanare.
El mes de enero se presentará como un periodo de transición, con una disminución gradual de las lluvias en diversas partes del país, lo que señala el comienzo de la temporada seca.Para el mes de febrero, se espera un cambio significativo en las precipitaciones.
Aunque las lluvias en general podrían ajustarse al promedio histórico en la región de la Orinoquía, se anticipa un incremento en el sur de Casanare, así como en Meta y Vichada, donde las lluvias podrían superar entre un 10% y un 20% los niveles habituales.El Ideam advirtió sobre la incertidumbre inherente a los pronósticos a largo plazo, recomendando a las autoridades y a la población mantenerse alertas ante posibles cambios inesperados.
Como medida preventiva, se sugirió reforzar infraestructuras en áreas vulnerables a inundaciones y asegurar un uso eficiente del agua en zonas propensas a sequías.
El llamado a la acción es claro: tanto las entidades locales como los ciudadanos deben estar preparados para manejar los efectos del clima, coordinando esfuerzos para mitigar los impactos derivados de las variaciones climáticas extremas durante este periodo.
