El ataque ocurrió alrededor del mediodía del 29 de diciembre en la calle 5 con carrera 30, en pleno centro de Aguachica. Un sicario, que llegó en motocicleta, abrió fuego contra una familia que disfrutaba de su almuerzo en la terraza de un restaurante. Los miembros de la familia Lora Rincón, que estaban en el establecimiento, fueron alcanzados por múltiples disparos, lo que resultó en su muerte instantánea.
En medio del pánico, los demás comensales intentaron refugiarse mientras escuchaban las detonaciones. La comunidad reaccionó rápidamente, pero solo uno de los miembros de la familia, quien fue trasladado a un centro de salud, sucumbió a las heridas poco después de llegar al hospital.
Las víctimas fueron identificadas como el pastor Marlon Lora, su esposa Yurlay Rincón y sus hijos Ángela y Santiago Lora Rincón. Se sabe que la familia tenía un fuerte compromiso religioso y comunitario en la región. Según informes preliminares, la familia pertenecía a las Iglesias Bíblicas Misioneras y el pastor Marlon Lora era reconocido como un líder local.Las autoridades locales, al ser alertadas, llegaron rápidamente al lugar de los hechos y comenzaron a investigar el crimen.
A pesar de que la policía no ha emitido una declaración oficial sobre el ataque, se han intensificado los esfuerzos para esclarecer los responsables de esta tragedia.El ataque ha conmocionado a la comunidad de Aguachica, que se encuentra de luto por la pérdida de una familia tan cercana y respetada. En señal de duelo, la alcaldía de Aguachica anunció la cancelación de las festividades de fin de año previstas para ese día. La alcaldesa Greisy Roqueme condenó el crimen, calificándolo como un acto de violencia injustificable y pidió que se haga justicia.
Este ataque sicarial se ha sumado a una creciente ola de violencia en el departamento del Cesar, que en lo que va de 2024 ya ha registrado varias masacres. La Defensoría del Pueblo también condenó los hechos y pidió a las autoridades reforzar las medidas de seguridad para proteger a los líderes sociales y religiosos de la región.
La masacre en Aguachica es la número 76 en Colombia en lo que va del 2024, y refleja una preocupante escalada de violencia que afecta especialmente al sur del país.
