
El Tribunal Administrativo de Casanare ratificó en segunda instancia la nulidad del Acuerdo 023 de 2013 y del contrato de concesión 1048 de 2014 y Yopal lo celebra.
Estos actos se relacionaban con servicios esenciales como el Registro Único Nacional de Tránsito (RUNT), la implementación de sistemas de fotomultas y el apoyo a la gestión del cobro coactivo en el municipio. Una verdadera gallinita de huevos de oro que por más de una década se embolsilló jugosos recursos, de los cuales, tan solo las migajas quedaban para la ciudad y el resto era para unos terceros.
Contexto
El Acuerdo 023 de 2013 fue aprobado por el Consejo Municipal de Yopal con el propósito de autorizar la celebración de un contrato de concesión. Este contrato, que fue suscrito durante la administración del alcalde Wilman Enrique Celemín y está lograba la implementación de varios servicios, incluyendo la instalación de fotomultas.
Por dónde se dejaron caer
Como era de suponerse, al ser un acto de dudosa reputación, durante el proceso se realizaron cambios significativos al proyecto original, el cual no contaban con el respaldo técnico ni legal necesario, lo que encendió las alarmas en las autoridades judiciales quienes atendieron el llamado de algunos líderes cívicos y políticos.
Guerra jurídica
Para la época, el exalcalde de Yopal René Leonardo Puentes y el hoy gobernador de Casanare César Augusto Ortiz Zorro, entre otros; radicaron los primeros alegatos pidiendo la nulidad de estos actos administrativos.
No obstante, SETTY se valió de un abanico de artimañas jurídicas para dilatar el procedimiento, lo que llevó al Consejo de Estado a advertirles sobre posibles sanciones por abuso de recusaciones y acciones infundadas.
El Bendito fallo
En un fallo de más de 30 páginas, el cual fue revelado en las últimas horas, la magistrada Aura Patricia Lara Ojeda, ponente en este litigio jurídico, logró demostrar que entre el proyecto original y el que finalmente acomodaron entre Algunos concejales, el exalcalde de Yopal Wilman Celemin y el cuestionado secretario de tránsito de la época, Rolfer Roncancio, era absolutamente distante al proyecto original, y esas modificaciones carecían del soporte técnico y financiero adecuado.
De manera extraoficial se ha podido conocer que Roncancio estaría buscando relacionamiento con el gobernador Zorro, pues lo ha seguido a varios eventos públicos, al parecer pretendiendo algún interés; no obstante, siendo el mismo César quien peleó con garras por esta concesión leonina, no sería coherente darle cabida a cualquier tipo de negocio, componenda o acuerdo con el polémico exsecretario de tránsito.
‘Avivatos’
Se teme que con el Acuerdo 023 de 2013 y del contrato de concesión 1048 de 2014, privados se hayan hecho a miles de millones de pesos que debieron entrar para la Alcaldía de Yopal, pero por el contrario, llenó las arcas de unos ‘avivatos’ que viven del negocio de las fotomultas y los servicios de tránsito, dinero ‘pulpito’ que se ganaban solo por hacer un proceso que la alcaldía debería hacer y no significarle dinero a los usuarios.



