Una completa y actualizada radiografía de la flora y fauna silvestre, así como el componente social y económico de la gran Orinoquía, presentan Ecopetrol, el Instituto Humboldt y la Sociedad Alemana para la Cooperación Internacional GIZ. Se trata de un documento clave para entender, gestionar y conservar el capital natural del territorio.
El Gran Libro de la Orinoquía Colombiana responde a la necesidad de entender el origen geofísico de los paisajes, las características de los ecosistemas y las dinámicas socioambientales que han consolidado en el territorio.
La presentación de este volumen se realizó a través de un conversatorio virtual que contó con la participación del Embajador de Alemania, Peter Ptassek, el Ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Carlos Correa, la rectora de la universidad EAN, Brigitte Baptiste, el Gerente de Desempeño Ambiental de Ecopetrol, Santiago Martínez, la Directora de la Fundación Canaguro, Laura Miranda, el coordinador del proyecto Tonina de GIZ, Sebastián Sunderhaus, y el Director General Instituto Humboldt, Hernando Garcia.
Su formato tipo enciclopedia, fácil de leer y consultar, consolida una completa información de la biodiversidad, los servicios ecosistémicos, las dinámicas históricas y sociales que han forjado los paisajes socioecológicos de una de las regiones más ricas y conservadas del planeta.
El libro será distribuido en bibliotecas, universidades, instituciones, gestores de biodiversidad y ONG´s, entre otras entidades y estará disponible en el repositorio virtual del Instituto Humboldt para descarga gratuita.
“La Orinoquia es una de las regiones del país que aún conserva gran parte de sus áreas naturales. A pesar de estar ocupada desde comienzos de la colonia, todavía tiene zonas con una alta integridad ecológica, es una región que como macrocuenca-red natural de cauces de agua, posee una oferta muy amplia de servicios ecosistémicos dado que dispone desde áreas nivales, fuentes hídricas y zonas semiáridas”, comentó Clarita Bustamante, editora de la publicación.
El uso de la tierra en la Orinoquía ha sido cambiante y sus comunidades han liderado la implementación de modelos de desarrollo participativos para sus territorios. Es una de las regiones que cuenta con el mayor número de Reservas de la Sociedad Civil – RSC, lo que refleja la conciencia social frente al rol de la ciudadanía en la conservación, conectividad y funcionamiento socioambiental del territorio.
La Orinoquía en datos
• La Orinoquia en Colombia ocupa 34.720.832 hectáreas, cargadas de diversidad de vida, paisajes y culturas: montañas inmensas que indígenas y campesinos habitan y aprovechan desde las frías cumbres hasta los bosques cálidos ubicados a menor altitud.
• Cuenta con extensas planicies que pasan de ser desiertos temporales a grandes humedales, selvas achaparradas como las de Matave´n, de población indígena mayoritaria, grandes afloramientos rocosos como la Sierra de La Macarena, y zonas de colonización y ciudades en desarrollo y crecimiento acelerado como Villavicencio, Yopal y Puerto López.
• La cuenca del Orinoco ocupa casi la cuarta parte de América del Sur y está conformada por unos 750 ríos y miles de arroyos y quebradas.
• Poseen 156 ecosistemas no intervenidos.
• Se estima que a lo largo de la cuenca del río Orinoco hay una población de 10 millones de personas que vive y realiza actividades productivas, que aporta a las economías de Colombia y Venezuela.