Tras labores de inteligencia, se estableció que en este laboratorio se procesaba permanganato de potasio y se acopiaban otros químicos que son fundamentales para convertir la pasta base de coca en clorhidrato de cocaína.
Al parecer esta pasta base es traída desde los departamentos de Caquetá, Meta y Vichada, por grupos de delincuencia organizada al servicio del narcotráfico, que buscan utilizar al departamento de Casanare para procesar el alcaloide, pero que gracias a la acción de las autoridades, logra impedirse.
Cuando se identificó el sitio, llegaron uniformados de la Policía y el Ejército, quienes encontraron una construcción rústica de madera y plástico.
Allí encontraron 3.575 kg de soda caustica, 6.025 kg de carbón activado, 3.204 kg de permanganato de potasio, 825 kg de cloro, 8.025 galones de pergamino líquido, 1.575 galones de permanganato en solución, 14 cilindros de gas de 100 libras, llenos y 13 vacíos, tres calderas metálicas una resistencia a gas y 21 quemadores.